preguntas ociosas

Desde que recuerdo, siento una especial fascinación por "el que sabe". Tengo la firme convicción de que por cada misterio del mundo (y quizá del universo) existe cuando menos una persona que tiene el conocimiento, las respuestas, que sabe exactamente que pasó, las causas y motivos, los orígenes y en fin todo lo relativo a ese suceso en particular. Y bueno, como ya lo he confesado más de una vez, soy una persona de naturaleza inquisitiva, curiosa, morbosa y hablando de frivolidades que admito se me dan muy bien, hasta chismosa. Cuando era pequeña imaginaba el cielo (el paraíso) como una gran biblioteca donde podría encontrar respuesta a todas mis dudas, e incluso imaginaba sesiones de preguntas y respuestas con dios. Mmmm, aún ahora creo que ese sería un buen cielo. Pero lo que si me queda claro es que seguro hay algunos privilegiados que tienen sino todas las respuestas, al menos muchas. Me preguntaba sí tuviera acceso a esa información, que quisiera saber. Y claro están las obvias y obligadas, muchas son lugares comunes, (esa simpleza mía): ¿realmente tienen o tuvieron extraterrestres en el área 51? ¿que sucedió con Marilyn Monroe? ¿Quién mató a Colosio? ¿Donde está el muñeco bebe de mi Happy Sunshine Family que perdí cuando tenía como 10 años? ¿como construyo Ed Leedskalnin su castillo de coral? ¿y los egipcios sus pirámides? ¿qué pasó con los mayas? ¿que hizo Jesús los otros treinta años? ¿de verdad existió? ¿donde esta enterrado el tesoro que mi abuelo buscaba? ¿quién era Jack el destripador? ¿de verdad llegaron a la luna? y etc etc etc. Algunas leyendas urbanas propagadas por el cine dicen que ciertos presidentes tienen conocimiento de algunos de estos conocimientos. Hay una película muy mala con este actor que se me olvida su nombre pero que es sobrino de F. F. Coppola mmmm como se llama... bueno, en esa película hay una especie de bodega protegida por el gobierno gringo donde se almacenan documentos y artefactos que dan respuesta a muchos de estos misterios. Supongo que estar ahí sería como estar en el cielo. Y el Vaticano, ¿que tal? y la extinta biblioteca de Alejandría. Aunque pensándolo bien, estos lugares requieren de eruditos... bueno me conformaría con leer los libros de divulgación que ellos publicaran después de indagar libremente por la mente de dios.